EL SENADOR NACIONAL ENTRE LA ESPADA Y LA PARED Camau reconoció reunión con espías  Fue el propio ex Intendente capitalino el que aceptó haberse reunido con D'Alessio y Barreiro. Lo hizo luego de que el último de ellos lo mencionara en su declaración ante el juez Ramos Padilla. La imagen del ambivalente legislador (supo estar con el kirchnerismo; luego, con Macri y ahora, otra vez con los K) quedó en la picota, agravándose aun más su situación por ser integrante de la Comisión Bicameral encargada de controlar el buen uso de los servicios de inteligencia. En los corrillos están quienes creen que es un pase de factura del Gobierno central, por jugar en contra, luego de casi cuatro años de permeabilidad estratégica con el oficialismo nacional. Ayer, el senador Ricardo Colombi, en declaraciones realizadas a la AM 1.100, replicó enojado anunciando posibles acciones judiciales.
Carlos Mauricio "Camau" Espínola reconoció ayer que mantuvo conversaciones con dos "espías inorgánicos", Marcelo D'Alessio y Hugo Barreiro, quienes fueron detenidos en el marco de una causa -a cargo del juez, Alejo Ramos Padilla- que en la actualidad acapara la atención institucional argentina, sobre una red que utilizaba los servicios oficiales para chantaje y aprovechamiento político.
El Senador nacional por Corrientes integra la Comisión Bicameral de Organismos y Actividades de Inteligencia del Congreso. Éste es un dato de relevancia mayúscula si se tiene en cuenta que en las últimas horas, el legislador fue mencionado por uno de los ex (?) agentes involucrados, asegurando que se hizo "un trabajo" para Espínola en épocas de la campaña electoral de 2017, donde fue (por segunda vez) candidato a Gobernador, en competencia con Valdés, detalle que toma dimensiones mayores al recordar que Barreiro señaló que debía "escuchar" al Gobernador y a Colombi como parte de su tarea.
Y esta coyuntura se agrava incluso más al repasar que a finales de marzo, este espacio parlamentario de análisis que integra Camau recibió al Juez Federal de Dolores para ahondar sobre los hechos que mantienen en vilo a la clase política y empresarial del país.
LA ACLARACIÓN
"Hubo una reunión, pero fue exclusivamente a modo de información para saber qué experiencia se tenía de lucha contra el narcotráfico", comentó ayer Espínola en diálogo con radio Sudamericana, intentando aplacar los cuestionamientos que recaen sobre su rol en el Congreso de la Nación. Dentro de sus aclaraciones enfatizó: "Desde aquella vez ya no tuve contacto con esa gente".
Dejó entrever que sufrió una especie de engaño al verse obnubilado por la figura de D'Alessio, ya que "era una persona que salía en los medios importantes, como abogados especialistas en narcotráfico, uno de los temas que planteé en mi campaña. Esa reunión fue de manera informativa, para ver qué experiencia teníamos en el tema y después de esa reunión nunca más tuve otra con esta gente", remarcó.
Además, el legislador nacional intentó quitarle cualquier carga de ultra espionaje al asunto, haciendo hincapié en que "la reunión de la que hablan fue en un lugar público, en mi despacho; no fue en un lugar oculto", aseguró.
Resulta más que oportuno mencionar que Barreiro habría relatado al Juez que participó de un encuentro con D'Alessio y Camau, y que el Senador le habría ordenado realizar seguimientos al ex gobernador, Ricardo Colombi y al mandatario correntino, Gustavo Valdés.
Por último, y para evitar más achaques, Espínola aseguró que se pondrá a disposición de la Bicameral de Inteligencia y de Ramos Padilla.
Pese a todo, se anima a pensar en el 2 de junio
Camau Espínola no dejó pasar la oportunidad de hablar sobre las elecciones provinciales del 2 de junio. Consideró que, pese a que el PJ irá dividido, "después habrá que unificar criterios en un trabajo en conjunto en propuestas legislativas que se necesitan como una visión de desarrollo de la Provincia".
El Senador aceptó que el oficialismo podría quedarse con la mayoría de las bancas. "Probablemente esté en una situación favorable con todos los partidos que logró convocar", dijo sobre Encuentro por Corrientes.
Más allá de sus escuetas opiniones respecto al escenario electoral correntino, se debe mencionar que en las últimas semanas, la tesitura asumida por el ex Intendente capitalino generó voces lapidarias dentro del justicialismo. Desde la mayoría de los sectores no comprenden a qué "juega".
Es que desde que asumió Macri (en 2015), el legislador correntino votó cada ley que Cambiemos propuso en el Congreso, y lo hizo pese a la negativa orgánica del justicialismo. También negó a Cristina Kirchner cual Pedro a Jesús, asegurando que la ex Presidente, quien lo catapultó en el escenario político como Jefe comunal, "es el pasado" (sic). Luego, dejó al kirchnerismo para pasarse al espacio que comanda Pichetto y Urtubey, Alternativa Federal, para virar en los últimos días de regreso al kirchnerismo (en este caso, provincial).
Su subordinación hacia la denominada "Cooperativa" partidaria lo dejó expuesto ante la dirigencia provincial, marcando un retorno al Frente para la Victoria que lo instala como el nuevo Borocotó, puesto que hace no mucho había reconocido que votaría el desafuero de Cristina.
Ricardo montó el picazo
Quizás sea el estreno de Gustavo Fresneda como Juez Federal, dado el caso del que se trata, con teléfonos "pinchados" y demás. Pero lo cierto fue que, dentro de este particular contexto, se sumó ayer el relato de Ricardo Colombi, uno de los espiados, según habría aseverado Barreiro.
El ex Gobernador fue tajante: "La Justicia tiene que investigar y llegado el caso accionaremos contra el Senador (Espínola)", aseguró en una entrevista con la mesa periodística de María Mercedes Vásquez, por radio Mitre Corrientes.
Viernes, 5 de abril de 2019
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