La ausencia de Cristina: El Gobierno salió a marcarle en público límites a Boudou LÍMITES A BOUDOU Abal Medina y Randazzo advirtieron que quien “conduce” es Cristina Kirchner. Ayer se levantó un acto del vice en la Casa Rosada y también trascendió que no iría a Calafate como estaba previsto. Un día después de la operación de la Presidenta, el Gobierno salió al cruce ayer de los ruidos políticos por el rol que tendrá el vicepresidente en su interinato. A través del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, explicitó el papel acotado que tendrá Amado Boudou, y ratificó el liderazgo de Cristina Kirchner: “La única que tiene el poder es la Presidenta”, afirmó.
“Las decisiones las toma la Presidenta, que es la que se encarga de dar instrucciones. El país esta funcionando normalmente”, abundó Abal Medina.
Sobre el vice, apuntado por el escándalo Ciccone y según se afirma, a un paso de ser procesado en otra causa por enriquecimiento ilícito, el jefe de Gabinete confirmó así que tendrá un papel más protocolar, pero al mismo tiempo lo defendió. “No hay especulaciones. El vicepresidente estuvo la noche anterior a la operación con la presidenta. Se sigue gobernando de forma normal”, afirmó.
En términos similares habló también el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo. Pero declinó referirse a la cuestión de quién toma las decisiones: “No voy a entrar en ese juego, yo me manejo como siempre”, afirmó en la explanada de la Casa Rosada, donde exhibió las nuevas motocicletas de 600cc destinadas a la Agencia de Seguridad Vial.
En cuanto a la agenda del vice, esta previsto que viaje hoy a Catamarca, pero según pudo saber Clarín, ayer la Casa Rosada decidió no mandarlo este viernes a El Calafate a la inauguración de instalaciones del Banco Nación. “Se ocupará la familia. Alicia Kirchner”, dijeron fuentes oficiales en referencia al viaje a la ciudad que Cristina considera “su lugar en el mundo”.
La semana que viene, el Gobierno le bajaría más la exposición al vice, y la posta de Cristina sería retomada con protagonismo de alguna otra “figura” del elenco oficial.
En estos vaivenes de la Casa Rosada -donde se toman decisiones para contrarrestar lo que entienden como una “carga mediática” sobre el vice-, en el entorno de Boudou habían dicho que ayer por la tarde en el Museo del Bicentenario iba a encabezar la puesta en marcha del Instituto Nacional de la Música, pero nada ocurrió. En la Rosada aseguraron que no estaba en agenda. Tras el acto en Córdoba donde mantuvo videoconferencias “a lo Cristina” e inauguró un puente en medio de fuegos artificiales, fue contrastante el ostracismo del vice ayer, se señaló en fuentes políticas.
Boudou asumió el lunes y estará a cargo del Ejecutivo, en principio, durante los 30 días que se extenderá la recuperación de la Presidenta, según aseguraron los médicos que la tratan.
Frente a las cruciales elecciones legislativas del 27, en que el oficialismo pelea desde atrás en los principales distritos según todas las encuestas, el Gobierno había alejado a Boudou de la campaña y le habían diseñado varios viajes al exterior. Pero el episodio de salud presidencial obligó a convocarlo de urgencia.
Cristina misma instruyó a Boudou -que estuvo con ella en Olivos el domingo a la tarde- para que continuara su agenda de actividades. La “administración del poder” fue delegada a un pingüino del riñón K, el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, que desde siempre ocupó un rol destacado en el círculo de confianza de los Kirchner.
En declaraciones radiales, Abal Medina definió que en el Gabinete “somos simplemente asesores de ella y formamos un equipo de trabajo, que en este caso encabeza el vicepresidente”.
A todo esto, otro referente del ultrakirchnerismo que fue contundente respecto del rol de Boudou fue la diputada Diana Conti: “No tengan dudas de que las decisiones políticas trascendentales las sigue tomando ella (Cristina) y el vicepresidente acata ”.
Conti –que en algunas ocasiones asume el papel de vocera informal del Gobierno– ilustró también el rol del hijo presidencial, Máximo, señalado junto con Zannini como integrantes del estrecho círculo de influyentes.
“ Máximo, muy compenetrado con los asuntos que manejaba su padre (Néstor Kirchner) y los que maneja su madre; seguramente es el nexo de transmisión (de las órdenes) porque es el hijo ”, dijo Conti. Y admitió: “Probablemente está más en la habitación con ella que alguien que no es familiar; Máximo siempre opinó y con sentido muy común, muy ubicado siempre”.
Fuente: Clarín.
Jueves, 10 de octubre de 2013
|