POR JUAN SEBASTIAN FIORI Crónica de una muerte anunciada  No es novedad que el partido justicialista de Paso de los Libres viene hace una década en franco declive, cada elección parecía que tocaba fondo y sin embargo aún le quedaba resto. Así de grande es el Movimiento Nacional Justicialista, un grupo de mercenarios impresentables no terminan de destruirlo.
En los últimos tiempos el procesado y elevado a juicio oral y público por delitos de acción pública Alberto Yardin consiguió eludir todas las internas, nunca accedió a un cargo público por elecciones internas sino a dedo, como concejal, presidente del partido y después diputado nunca se supo la opinión de los afiliados ni de los independientes, así rodeado de un séquito de inescrupulosos jugó siempre a dividir para reinar y seguir viviendo de la política. Todas las elecciones municipales las ha perdido. Quien sigue su camino es el Chaqueño Walter Fontana, también puesto a dedo para presidir el Pj de Libres. Coinciden en muchas cosas, ambos tienen causas judiciales, ambos dividieron y destruyeron el partido, ahora parece que Fontana decidió darle el Jaque Mate, una lista de gente que no representa a nadie lograda por “consenso” representará al partido en las elecciones municipales del corriente año.
Se avecina otra calamidad electoral, los partidos que antes eran aliados están avizorando el iceberg cerca y al PJ lo ven como al Titánic que marcha inexorablemente a su hundimiento. Este cronista siempre sostuvo estas realidades y se ganó el odio y el desprecio de quienes integran el partido orgánicamente, lo que en este caso es un verdadero orgullo, nadie puede vanagloriarse de aplausos de delincuentes y perdedores.
Hoy con tristeza vemos que la destrucción es catastrófica y que llevará mucho tiempo reconstruir un partido en ruinas. Esperemos que los desaciertos del inepto de Fontana sean los últimos y después empiece la reconstrucción. Cada vez queda más en evidencia la complicidad y los negociados con el radicalismo gobernante, algo que también sostuve en muchas columnas y en tantas charlas políticas, sino no se entiende el trabajar denodadamente para perder sistemáticamente frente a un radicalismo comandado por Peteco Vischi que le debe a este peronismo la fortuna que ostenta y los cargos que obtuvo.
Muchos saldrán a criticarme, eso es lo que espero, a ellos les respondo de antemano con dos máximas justicialistas: “No se vuelve del ridículo y la única verdad es… la realidad”.
Jueves, 23 de febrero de 2017
|
