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Luciano Galetti "La Figura"
Bolivia (1) - Argentina (2) "Quedara en la Historia"
Luego de estar en desventaja, la Argentina derrotó por 2 a 1 a Bolivia con goles de Figueroa y Galletti, la figura de la cancha; el equipo impuso su inteligencia y su compromiso táctico.



LA PAZ.- Hubo que esperar mucho, pero aquel seleccionado que fue bautizado como fantasma ya tiene un digno sucesor. Pasaron más de 31 años para derribar el tabú de los 3600 metros de La Paz, una adversidad que siempre fue tan o más perturbadora que lo que podría plantear Bolivia.


Paradójicamente, un grupo de jugadores que empieza a ser parte del seleccionado se encargó de marcar un hito histórico. Lo hizo de la manera con que se llega al éxito: con humildad, laboriosidad, sentido de la responsabilidad, compostura táctica, compromiso colectivo e inteligencia. El sello Pekerman, en definitiva. Y hasta con una dosis de heroísmo, porque cabía ser pesimistas cuando Bolivia se puso en ventaja al comienzo del segundo tiempo. Era un golpe como para tumbar todo lo bueno que se había hecho en el primer tiempo, cuando la Argentina había acertado en la contención y también pudo desnivelar con un par de jugadas de Galletti y otra llegada de Duscher.


En ese momento crítico, cuando el tanque de las energías ya empezaba a vaciarse y el ánimo podía resentirse, la Argentina mantuvo la serenidad y también recurrió al amor propio. Y en cinco minutos dio vuelta el resultado, en un pleno aprovechamiento de las concesiones de Bolivia, que se defendió muy mal, dejó espacios de la dimensiones de un cráter y no mostró ningún rigor en la marca. En el empate de cabeza de Figueroa, Angulo se demoró en salir y habilitó a casi cuatro argentinos que fueron a buscar el centro de Maxi Rodríguez.


Antes del tanto del triunfo de Galletti, el seleccionado se vio beneficiado por la falta de sanción de una mano de Cufré adentro del área. Casi enseguida se produjo la notable habilitación de Cambiasso a Galletti, que ingresó libre, vacío, para definir sobre la indecisa salida de Leo Fernández. El gol unía a las dos mejores individualidades. Cambiasso fue patrón en la zona central; cortó y jugó con la categoría del que ya tiene bastante mundo sobre sus piernas. Galletti fue el faro ofensivo al que todos buscaban, y él respondió con una generosidad conmovedora para picar una y otra vez por todo el frente de ataque. Siempre se exagera cuando se dice que alguien "dejó la vida" en una cancha, pero en el caso de ayer de Galletti habría que darle cierta veracidad a esa figura.


El triunfalismo es encubridor y que la Argentina haya ganado no significa que no haya sentido los efectos de la altura sobre el físico. Supo adaptarse a esa circunstancia y se encontró con un rival sin confianza, bastante desorientado, que no supo desgastarlo ni hacerle sentir el ritmo. Todo lo contrario a lo más aconsejable. Lo más claro y lúcido de Bolivia salía de los pies del veterano Platini Sánchez, tan estático como preciso y agudo en los toques y las asistencias. La Argentina debió encimarlo más y no dejarlo pensar tanto. Fue la única facilidad que otorgó, porque entre la línea de la defensa y la de los volantes se armó un bloque compacto y recuperador.


Como era de prever, la Argentina salió a aguantar, a especular con la desesperación rival y a buscar -más que a esperar- su oportunidad. Un planteo sobrio y realista, que rara vez tambaleó y le dio frutos. Así, este grupo de muchachos que, salvo Abbondanzieri, ni siquiera había nacido en aquel lejano triunfo del seleccionado fantasma, le dio a la Argentina el impulso mundialista en una de las escalas más arduas y complicadas.


3 los goles que lleva convertidos Figueroa en las actuales eliminatorias; Crespo tiene cuatro .


Las claves





Orden y sacrificio


Apoyado sobre el sacrificio colectivo y con especial hincapié sobre la recuperación del balón, el seleccionado argentino desplegó un planteo que jamás perdió el orden.


Oportunismo


El conjunto de Pekerman supo aprovechar las flaquezas de un adversario atormentado. Bolivia, sin empuje ni coraje, incurrió en demasiadas distracciones defensivas. Y pagó por ello.


Solidez colectiva


Pese a tratarse de una formación alternativa, con poco roce como conjunto, la selección mostró una conducta colectiva sólida, confiable. Nadie desentonó ni cometió errores.


Fortaleza anímica


Pese al golpe anímico de recibir un gol con sabor a injusticia, la Argentina exhibió capacidad de reacción para superar un momento desfavorable. Tuvo temperamento y fortaleza mental.


EL CAPITAN

La cinta para el "Pato"

Por primera vez, ayer, el "Pato" Abbondanzieri fue el capitán de la selección; con Pekerman, antes habían llevado la cinta Sorin, Milito y Mascherano.


EL DATO

El juez Larrionda trae suerte

Con el juez uruguayo Jorge Larrionda la selección nunca perdió en las eliminatorias. Para Corea-Japón ya había vencido a Colombia y a Perú.


LOS DEBUTANTES


Seis bautismos en la altura


El estreno no podía ser mejor: Galletti, Zárate, Scaloni, Duscher, Palacio y Cufré ayer tuvieron su bautismo por las eliminatorias con la selección.


LO NEGATIVO

El derrumbe de la fortaleza

Antes de caer con la Argentina, en la ruta a Alemania 2006, en La Paz, Bolivia ya había perdido 2 a 0 con Chile y había empatado con Uruguay (0-0).


La Nación Deportiva.



Domingo, 27 de marzo de 2005
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