Interés General El cuestionamiento a la inflación del Indec llegó a un medio económico clave de EEUU  Bloomberg, la principal agencia de noticias financiera del mundo, advirtió por los cuestionamientos al actual IPC.
El Indec admite que todavía no tiene los avales del Poder Ejecutivo para publicarlo.
Los cuestionamientos al modo en el que el Indec mide la inflación siguen creciendo y, ahora, llegaron nada menos que al "círculo rojo" de Estados Unidos: la principal agencia de noticias económica y financiera del mundo, Bloomberg, publicó un artículo completamente dedicado a criticar el actual IPC. Mientras, el organismo estadístico reconoce que todavía no tiene el aval del Ministerio de Economía para publicar el nuevo índice.
"El milagro de la inflación de Milei, distorsionado por elementos obsoletos en el índice", se titula el artículo publicado por Bloomberg este martes, firmado por el periodista Ignacio Olivera Doll.
"Son más fuertes los reclamos para que el gobierno del presidente Javier Milei rehaga la composición del índice por primera vez en dos décadas, descartando elementos obsoletos y agregando otros nuevos que se han vuelto básicos de uso diario, como, por ejemplo, las suscripciones al iPhone o a Netflix", advirtió la nota de Bloomberg y agregó que "la mayoría de los economistas creen que un índice actualizado revelará una inflación superior a las lecturas mensuales actuales, de aproximadamente el 2,5%".
El nuevo IPC del Indec Hace ya siete meses que el Indec viene amagando con reemplazar el actual IPC. En septiembre pasado, el titular del organismo, Marco Lavagna, dijo en una entrevista radial que "dentro de dos meses", o sea en noviembre, lanzaría el nuevo índice. Sin embargo, los meses pasaron y no hubo desde entonces ninguna novedad oficial.
Según pudo saber El Destape, el nuevo IPC utilizaría como parámetro a la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo) de 2017, a diferencia de la actual canasta que data de 2004 y ya está sumamente desactualizada. Incluye, por ejemplo, "cigarrillos, diarios de papel y teléfonos fijos", como remarca Bloomberg, además de un peso de las tarifas relativamente bajo.
La ENGHo de 2017, al contrario, presenta un peso de las tarifas más acorde a los fuertes aumentos de luz y gas de los últimos años, e incorpora servicios como la telefonía celular y los streaming, de poco peso o directamente inexistentes 21 años atrás.
El problema es que, por lo tanto, todo hace suponer que con el nuevo IPC la inflación mensual sería mayor a la actual. Por caso, según la consultora LCG, de haber utilizado la ENGHo que quiere el Indec la inflación de enero no hubiera sido del 2,2% sino del 2,8%, 0,6 puntos mayor (una diferencia del 27%).
Esta diferencia se ve reflejada en el IPC de CABA. La inflación medida por el Instituto de Estadística y Censos del gobierno porteño fue del 136% en 2024, 15 puntos por encima que la medida por el Indec para el Gran Buenos Aires.
El Indec admite que no tiene el aval oficial para publicar el nuevo IPC Queda claro, entonces, que al Gobierno no le conviene sustituir ahora al viejo índice. Si lo hace y la inflación empieza a subir, tendrán que admitir su fracaso macroeconómico. Si, contrario a la intuición, siguiera bajando, volverán los fantasmas de la intervención del organismo, como ocurrió entre 2007 y 2015.
Además, la subestimación de la inflación genera el problema de distorsionar otros indicadores clave para la economía, como el nivel de pobreza, las paritarias, las jubilaciones reales y la tasa de interés, lo que forzaría al Gobierno a tener que modificar su programa respecto a estas variables.
Es en este contexto que el propio Indec argumenta que todavía "se están terminando las pruebas técnicas y las programaciones para poder tener listo el nuevo índice", según indicaron a El Destape fuentes del organismo. Aun así, éste admite que, pese a lo anticipado por Lavagna, aún no está la autorización del Poder Ejecutivo, al agregar que "cuando finalicen estas tareas y se cuente con los avales institucionales, se dará a conocer la fecha de difusión".
Si el riesgo real es que, con el nuevo índice, la inflación fuera más alta, como indican las consultoras privadas, el problema del timing actual no es solo la cercanía de las elecciones, sino también la reciente reducción del crawling peg. Un mayor diferencia entre la depreciación del tipo de cambio y la suba de los precios solo serviría para aumentar las especulaciones sobre una devaluación brusca, como las que causaron una fuerte sangría de divisas estos últimos días.
Jueves, 20 de marzo de 2025
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