Lunes, 10/2/2025   Paso de los libres -  Corrientes - República Argentina
 
MARIO MIDÓN
“Argentina es un país que ha perdido calidad institucional hace ya muchos años”
Rodeado de títulos, libros y papeles que ordenadamente integran su estudio jurídico, el reconocido constitucionalista correntino Mario Midón se refirió a la tercera edición de su Manual de Derecho Constitucional Argentino lanzado recientemente al mercado.


Más que una entrevista, la charla se transformó en una valiosa clase didáctica sobre esta disciplina a la que ha dedicado su vida: el Derecho Constitucional.

Este jurista de rica verborragia se desempeña actualmente como profesor titular de la cátedra “Derecho Constitucional” de la Facultad de Derecho, Ciencias Sociales y Políticas de la UNNE además de ser un reconocido abogado y autor y coautor de diversas obras literarias de su especialidad y de más de 200 artículos de perfil jurisprudencial publicados en revistas, boletines y diarios. Es Magíster en Procesos de Integración –título expedido por la UNNE- y Doctor en Derecho y Ciencias Sociales, título expedido por la UN de Córdoba. Fue Presidente de la Asociación Argentina de Derecho Constitucional y es miembro actual del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional, entre otras organizaciones de jerarquía.

Sobre su cualidad docente y su afinidad con esta rama del Derecho, cuenta Midón que si bien él se formó en la Escuela “Regional” como Maestro Normal Nacional y trabajó de periodista durante 2 años en un reconocido diario local, su didáctica académica tal vez tenga una estrecha ligazón con la genética heredada de su padre, quién era docente rural. Sin embargo- relata- me recibí de Abogado a los 21 años e ingresé a la Cátedra del doctor Vargas Gómez a estudiar Derecho Constitucional…y así que me fui enamorando de esta disciplina con el paso del tiempo.

Midón y sus Manuales de Derecho
Constitucional Argentino

La primera edición de esta serie de tres obras fue publicada por el doctor Mario Midón en 1996 “en él reflejé las reformas que había experimentado la Constitución Nacional en 1994” sostiene el letrado. Sucedía entonces que los estudiantes tenían mucha dificultad –al menos acá en nuestra Facultad de Derecho- con la bibliografía vinculada a estas reformas, porque debían consultar a 5 o más autores para precisar sobre el tema, lo que les representaba un enorme esfuerzo.

Mi primer manual se transformó entonces en un dato novedoso, que reflejaba no solo lo que irrumpía tras la reforma constitucional sino también como una sistematización bibliográfica que ayudaba al estudio” reconoce el docente. Explicó además que la II edición del manual se trató de una obra actualizada y ampliada de la primera. “Y esta III edición superó las mil páginas y refleja el valor mayúsculo que tiene para nosotros -los constitucionalistas- lo que la Corte Suprema de la Nación dice sobre la interpretación de la Constitución… porque definitivamente, esto es lo que en los hechos es la Constitución” remarcó.

Midón explicó que esta tercera entrega compendia una síntesis de los fenómenos políticos de mayor trascendencia institucional en los últimos años en Argentina. “En rigor de verdad, tiene como destinatarios básicos a los estudiantes, pero es también libro de cabecera de muchas Universidades del país y obra de consulta de profesionales del Derecho.

Explica sobre esto que la realidad de este tiempo hace que la lectura de manuales sea la primera instancia orientativa de se realiza ante la presentación de un problema o el estudio de un tema determinado. “Al ser de lectura fácil, ayudan al lector a ubicarse puntualmente en el tema dentro de la globalidad de la disciplina… y creo que esto ha llevado a que mis manuales sean objeto de muchas consultas” manifestó el autor.

Tiempos modernos = nuevos derechos

El entenado docente universitario explica que el Derecho Constitucional es una disciplina cuyo objeto de estudio son básicamente dos cuestiones: los derechos (en cuanto atribuciones se le reconocen a las personas) y las garantías, que son los medios para hacer valer tales derechos. A estos se le suma la organización y el funcionamiento de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial. “Esta es la sustancia de la disciplina, el centro de gravedad del Derecho Constitucional, pero la gran particularidad es que, en los últimos tiempos, ha crecido considerablemente en el terreno de las ciencias jurídicas.

Digo esto porque acontecimientos y materias que eran patrimonio de otras disciplinas han pasado a formar parte del mismo. Por ejemplo: hace 30 años, en la Argentina, nadie hablaba de los derechos del consumidor –que eran patrimonio del Derecho Civil- o de los problemas ambientales, los que parecían problemas que se estudiaban incidentalmente en el Derecho Agrario. Hoy, se han constitucionalizado –remarca- y forman parte del catálogo constitucional a los que se le han sumado nuevas garantías, como ser el Habeas Data, que guarda correspondencia con el incremento de la información en el mundo en estos tiempos, sostiene el constitucionalista. Apareció así el fenómeno de los bancos de datos informáticos con sus respectivos riesgos, como el de la acumulación de datos sobre las personas para comercializarlos, dijo Midón “hay empresas que se dedican hoy día a esto, pero hay datos sensibles que hacen a la intimidad de las personas, como ser sus amistades, su preferencia sexual o sus adicciones sobre las cuales la sociedad no tiene porqué conocer, porque simplemente son parte de la elección del modo de vida de cada uno. Sobre esto argumenta “estos nuevos derechos surgidos en el último tiempo guardan correspondencias con la actualidad; correlativamente, aparecieron mecanismos técnicos –llamados garantías- para que, frente a la lesión de los derechos, cualquier persona esté en condiciones de repeler las agresiones que puedan experimentar los derechos”.

La sociedad cambió y la ley refleja esos cambios

El DC es muy cambiante, muta con el transcurrir de los años, es una de las disciplinas con las que más se aprecian los cambios que se dan en el seno de una sociedad. Para ejemplificar esto, Midón tomó el fenómeno de la drogadicción. “Fíjese –explica- en un período de entre 30 y 35 años en Argentina, la Corte Suprema de Justicia ha fijado 4 posiciones sobre la constitucionalidad de las leyes que establecían sanciones para quién tenía estupefacientes para uso personal, aunque sea en pequeñas cantidades. En la época del proceso militar (1976-1983) había una ley que calificaba esta tenencia como delito. Cuando el primer gobierno de Alfonsín, la Corte dice sin embargo NO, esta norma que sanciona la tenencia de pequeñas cantidades de estupefacientes para uso personal es inconstitucional porque lesiona la capacidad de autodeterminación de una persona. En una tercera etapa (período menemista), la Corte vuelve al criterio inicial diciendo que está bien sancionar a aquellos y en este último período –tres años atrás- se vuelve al criterio de la época de Alfonsín y se sostiene que no se debe sancionar a los que poseen pequeñas cantidades de psicotrópicos para uso personal”.

Otra: el derecho a la identidad sexual, el cual generó muchísima discriminación y sin embargo hoy, la sociedad se volvió mucho más tolerante, remarca. Más allá del modo que yo piense, no tengo porqué cuestionar la forma de vida de los demás. No tengo porqué discriminar a aquel que hace su vida a su manera. Estos patrones de conductas que son aceptadas hoy en nuestra sociedad, no existían hace 30 años atrás… es decir, la sociedad cambió y la ley refleja ese cambio.

Los juicios que emite la Corte Suprema son, en definitiva, los juicios que, en lo que interpretación de la Constitución, van a marcar el paradigma de un tiempo.

“No son las mejores las vivencias institucionales de
este tiempo para la vida de la Nación”

Desafortunadamente es así, sostuvo el académico de la UNNE al ser consultado sobre la sentencia que versa en el prólogo de su tercer manual, donde asevera no son las mejores las vivencias institucionales de este tiempo para la vida de la Nación. “Somos un país que ha perdido calidad institucional hace muchos años. A este proceso puedo verlo con claridad en la época de Menem, cuando el Ejecutivo comienza a fortalecerse más y correlativamente el Legislativo decrece en competencia. A partir de allí Menem introduce –por vía de hecho y después regulado en la Constitución- el legislar por decreto. Qué significa esto? que regulaciones que tienen que ser producidas por el Congreso, terminan siendo producidas por el Presidente. De ahí en más, el Presidente empezó a hacer lo que de ordinario, con apego a la constitución, debía hacer el Congreso. Ese proceso llega hoy en Argentina a los extremos de superar toda regla y que poco importe a la sociedad si las nuevas leyes provienen del ejecutivo o del legislativo” y explica –con tono exaltado- “para esto los ciudadanos elegimos a los legisladores: para que hagan la ley, porque no es lo mismo que las leyes sean hechas por una sola persona – el Presidente en este caso- a que sean hechas por la suma de la representación que encabezan 72 diputados y 257 senadores. Correlativamente, en este proceso de declinación de las atribuciones congrecionales, el Congreso no controla al Poder Ejecutivo, entonces –obvio- la regla es la del descontrol, lo que conlleva a la impunidad, dijo ofuscado. Remarcó positivamente el control realizado por la Corte Suprema de Justicia descalificando a las llamadas “Leyes de Democratización de la Justicia” en nuestro país “esto sin dudas ha puesto un freno muy importante a esta cuestión” manifestó enfático.

El peso de la UNNE en la región

El profesor Midón sostiene convencido que la UNNE es un faro que ha irradiado cultura en todo el nordeste argentino “es un referente obligado, un actor decisivo de la vida política, social y cultural de nuestra región”. Y agrega “por vía de hipótesis, si suprimimos la existencia de la Universidad, qué hubiera sido de nuestra sociedad hoy? Cuánto tiempo atrás hubiéramos estado viviendo?.

Vale decir entonces que el valor de la Universidad –que generalmente uno lo mide en términos de cultura en cuanto influye en lo político, en lo económico y en todas las facetas de la vida, es inestimable. Los datos que ella transmite a la sociedad se ven reflejados en los patrones de comportamiento del ciudadano y en definitiva, en algún grado de mayor aproximación a las reglas de convivencia, que en última instancia conducen al respeto de la Constitución. Esto no significa que por tener una Universidad en nuestra región vamos a tener ciudadanos más honorables y respetuosos, pero propongo hacer el ejercicio inverso… si no tuviéramos a la UNNE en el nordeste, cómo y cuál sería nuestra vida hoy?.




Fuente: Tncorrientes.


Jueves, 28 de noviembre de 2013

   

Tel: 03772 - 422647 | contacto@elpasodeloslibres.com.ar
| San Martín 1135 - Paso de los Libres - Corrientes
| Director: Juan Sebastián Fiori
Copyright ©2013 | www.ElPasoDeLosLibres.com.ar Todos los derechos reservados.