LOS CANDIDATOS PORTEÑOS DEL FRENTE AMPLIO UNEN Tres que sí y una que ni Martín Lousteau, Alfonso Prat-Gay y el socialista Roy Cortina ya se lanzaron a la carrera por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Elisa Carrió, la mejor ranqueada de ese espacio en el distrito, coquetea entre la candidatura local y la presidencial. Aunque el calendario electoral porteño apura los tiempos, el Frente Amplio Unen comienza a definir con sigilo sus precandidatos a jefes de Gobierno. Ya lanzados el “independiente” Martín Loustau con el respaldo de gran parte de la estructura del radicalismo capitalino, el líbero Alfonso Prat-Gay en sociedad con Libres del Sur y el socialista Roy Cortina con la bendición de Hermes Binner, la gran incógnita es Elisa Carrió. La chaqueña es la que mejor ranquea en los sondeos de opinión entre el electorado porteño dentro del FAUnen, pero todavía coquetea entre su candidatura presidencial, dar pelea en la ciudad y hasta con una incierta postulación a la gobernación bonaerense, al tiempo que pretende erigirse como la “gran electora” de la alianza electoral porteña y fogonea una hipotética alianza con el macrismo. Jugado en la disputa presidencial, el líder de Proyecto Sur, Fernando “Pino” Solanas, quiere a su socia como candidata local para intentar desplazar al PRO de la ciudad y no en la competencia nacional.
La principal coincidencia en la alianza porteña es la necesidad de repetir “la exitosa experiencia” de su debut electoral: la multiplicidad de candidatos para atraer distintos estratos del electorado. A nadie incomoda la proliferación de candidaturas, donde la campaña mediática pesa más que las estructuras partidarias. Un tema en el que Carrió recuperó terreno y le saca una importante luz de ventaja a sus posibles adversarios. En el FAUnen todos admiten que Carrió encabeza los sondeos en la Ciudad, aunque prefieren ubicarla entre los presidenciables del espacio. “El perfil de su campaña es nacional”, dicen.
Pero la chaqueña juega a las incógnitas, descoloca a sus socios y les modifica la agenda. Primero propuso una alianza con el macrismo, lo que divide aguas en el frente. Después expuso una de las principales debilidades electorales del FAUnen con su incierta postulación a la gobernación bonaerense, donde escasean candidatos de fuste, que ella misma luego consideró inviable (no reúne los años de residencia para ser candidata). Pero su jugada también desató controversias. La líder del GEN, la bonaerense Margarita Stolbizer, no quiere a Carrió en su distrito. Otros, más pragmáticos, afirman: “Carrió mide bien en el primer cordón del conurbano bonaerense y comienza a subir en el tercero”.
La chaqueña es una de las más fervientes impulsoras de una presentación pública de la fuerza en la Ciudad –antes de fin de mes– con todo su abanico de candidatos. La mayoría de las fuerzas coincide. El cronograma electoral porteño apura los tiempos: las elecciones para jefe de Gobierno deben ser desdobladas y al menos tres meses antes de las nacionales (previstas para octubre de 2015). A eso, se suma la reciente adhesión porteña a las PASO para resolver las candidaturas, lo que obliga a presentar las alianzas en marzo del año próximo y los candidatos en abril.
Con el fixture electoral en mano y con Solanas jugado a la candidatura presidencial, en Proyecto Sur ya definieron sus preferencias en la Ciudad. “Lilita tiene que ser la candidata a jefa de Gobierno”, afirmó el legislador porteño y armador de esa fuerza en el territorio, Javier Gentilini, a este diario. Una decisión que tiene el guiño de Solanas.
Para los seguidores de Solanas, Carrió es la que está en mejores condiciones de “derrotar al macrismo” y consideran que su hipotético triunfo en la Ciudad tres meses antes de las presidenciales sería una vidriera que potenciaría a cualquier candidato del FAUnen a la Casa Rosada. Si no se diera lo de Carrió, Proyecto Sur podría inclinarse por Lousteau. El Partido Socialista Auténtico, otro aliado de Pino, no definió candidatos, mantiene “conversaciones con todos”, pero tampoco niega cierta preferencia por Lousteau.
La idea de que Carrió se transforme en la “gran electora” del FAUnen en la Ciudad ilusiona e inquieta a los ya lanzados. Lousteau, Pray-Gay y Cortina consideran que sus chances se agigantan si Carrió no es candidata, pero al mismo tiempo saben que la chaqueña tiene con cada uno de ellos coincidencias y también muchas diferencias y viejas disputas.
Lousteau es uno de los más entusiasmados con disputar el gobierno porteño. El economista ya recorre los comités y ateneos radicales como candidato para potenciar su alianza con la estructura de la UCR.
En aras del pragmatismo que profesa, a Lousteau no le disgustó la idea de una alianza con el macrismo y reconoce viejas amistades entre los funcionarios PRO, con muchos de los cuales comparte comidas y discusiones políticas. Sin embargo, fue uno de los que se opuso dentro de FAUnen a la propuesta de modificar las PASO y poder intercalar fórmulas (presidenciales y locales) entre ganadores y perdedores. “Es una solución a lo inmediato y urgente para intentar sostener la unidad de un frente, pero un obstáculo a futuro”, definió entonces ante varios de sus aliados.
Prat-Gay apuesta a una campaña con perfil de generador de “propuestas para el futuro”. Por eso trabaja, junto a sus aliados de Libres del Sur, en la creación de una fundación que materialice esos objetivos. Prat-Gay y Lousteau fueron los únicos “líberos” sin una agrupación política propia que lograron subirse al escenario del lanzamiento nacional del FAUnen, presentado como un “acuerdo institucional entre partidos políticos”.
El ex titular del Banco Central debe remontar su derrota en las internas de Unen que dejó a su sublema sin representación en las listas para las generales de la Ciudad en 2013. Sus aliados también deben resolver el tema de las alianzas, que comenzaron a desmoronarse tras la interna de Unen. A pesar de haber trazado un acuerdo estratégico con la UCR, la derrota en las PASO aisló a sus socios radicales porteños. Parte de su estrategia es ahora la de mostrarse como uno de los más férreos detractores del macrismo dentro de la alianza porteña.
El socialismo también tiene candidato: Cortina. A diferencia de sus –por ahora– otros dos contrincantes, el ex jefe de campaña de Unen cuenta con fuerza propia: el socialismo porteño es la estructura más importante y numerosa de ese partido en el país, luego de la de Santa Fe. Desde allí llegó el principal espaldarazo a su candidatura: Binner lo subió a su lado al escenario del teatro Broadway en la presentación nacional del FAUnen. Esa señal, dicen los socialistas, servirá para otras fuerzas menores en la Ciudad que formaron el ex FAP y que trabajan por la candidatura presidencial de Binner.
Cerca de Cortina también marcan diferencias con el resto de los candidatos del frente porteño: “Roy es el único que no es un paracaidista. Conoce bien la Ciudad, fue legislador, ministro del Gobierno porteño y el creador de la ley de comunas”, afirmaron a Página/12 los colaboradores del candidato que parece arrancar de atrás, al menos en las encuestas.
Por Miguel Jorquera.
Domingo, 11 de mayo de 2014
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