EN EL CONGRESO DEL PJ SE RATIFICO LA IDEA DE ORDENAR LAS CANDIDATURAS PARA MODERAR LA DISPERSION Una muestra de unidad antes de las urnas En línea con el discurso de CFK, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, transmitió la necesidad de que las primarias sean “acotadas” y “prolijas”. El mensaje fue compartido por los múltiples precandidatos, pero todavía ninguno declinó su postulación.
Reunido en Parque Norte, el Congreso Nacional del Partido Justicialista ratificó ayer la política de alianzas que viene impulsando hace años y acompañó a pleno la línea trazada el jueves por la presidenta Cristina Fernández respecto de la disputa por las candidaturas. Casi como el portavoz del mensaje de la Casa Rosada, el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, transmitió la necesidad de implementar unas primarias “acotadas” y “prolijas” para garantizar la continuidad del proyecto político en las elecciones de 2015: “No se trata de hacer lo que uno quiere, el proyecto no es individual, es colectivo”, afirmó. El mensaje de CFK fue compartido por los múltiples precandidatos del oficialismo tanto a nivel nacional como en la provincia de Buenos Aires, aunque todavía eso no se cristalizó en una decisión de los dirigentes, que ayer ratificaron con mayor o menor entusiasmo sus aspiraciones.
No faltó prácticamente nadie. Gobernadores, ministros, sindicalistas, legisladores nacionales, casi todos los postulantes a presidente y buena parte de los que aspiran a suceder a Daniel Scioli en la provincia fueron llegando al predio cercano a aeroparque alrededor de las 10 de la mañana. Uno por uno coincidieron con la idea que había expresado la primera mandataria: “Es bueno y legítimo querer ser presidente y gobernador. Y uno puede llegar a pensar también que uno es el más capacitado para esa función, pero no olviden que el resto de la sociedad tiene que creer que es el más capacitado”, dijo la jefa del Estado desde Chaco, poniendo el ejemplo del gobernador y ex jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, que se postula para intendente de Resistencia. A medida que iban llegando al congreso, cada uno ensayó cómo amoldarse a esas directivas.
“Comparto plenamente con la Presidenta que quien sea candidato de esta fuerza política debe ser un hombre que tenga poca preocupación por las tapas de los diarios sino por seguir adelante con las políticas impulsadas por este gobierno”, señaló Florencio Randazzo, en un nuevo dardo tácito contra Scioli. El ministro del Interior y Transporte se mostró confiado en que el mensaje de bajarse no era para él: “Al que le quepa el sayo que se lo ponga”, remató antes de entrar. También antes de subir al escenario, Scioli se refirió al tema: “La Presidenta hizo una reflexión general, no le habló a nadie en particular”, sostuvo el gobernador y aclaró que “todavía falta un mes” para el cierre de listas.
Los que sintieron que la definición presidencial los interpelaba puntualmente no lo dijeron en público, pero en Parque Norte la conversación entre los congresales y dirigentes era la misma: cómo se ordenarían los 12 precandidatos a gobernador bonaerense, los 5 que seguían en carrera para las nacionales, entre otros cargos electivos. Al día de hoy coincidían en que los mejor posicionados son Scioli y Randazzo y más atrás los siguen Urribarri, Rossi y Jorge Taiana (que no estuvo ayer porque no es congresal).
En la provincia, distrito clave para las PASO de agosto, todavía está decantando la situación tras la irrupción de Aníbal Fernández, que se lanzó el miércoles. Intendentes, diputados y ex ministros provinciales prefieren una sola fórmula “potente”, que podría ser Fernández-Julián Domínguez. Ese esquema, de todas maneras, dejaría a varios fuera de carrera, entre ellos el titular de la Anses, Diego Bossio, que se mueve en tándem con Sergio Berni. “Voy a ser el próximo gobernador de la provincia de Buenos Aires”, insistió ayer Bossio. El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, también ratificó sus aspiraciones, aunque descontaban que jugará por la reelección. No tanto por la necesidad de garantizar los votos, sino porque su candidatura ordenaría la disputa interna del FpV en el distrito. No se lo vio a Martín Insaurralde, que finalmente volvió al redil después de los coqueteos con Massa. Sin embargo, tras el mensaje presidencial daban por hecho que volverá a jugar por la intendencia de Lomas de Zamora.
Después de las rees de gobernadores con CFK días atrás, y de las rondas de negociaciones de las últimas semanas, el Congreso Nacional del PJ fue una demostración de unidad y una ratificación de los consensos alcanzados y plasmados en un documento. El conductor de la ceremonia fue el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, presidente delcongreso. El le pasó la palabra a su par de Salta, Juan Manuel Urtubey, que en una apasionada arenga peronista reivindicó el proceso iniciado por Néstor Kirchner y lanzó una crítica contra la oposición: “No vamos a hacer frentes o alianzas con grupos de poder. No necesitamos a los actores de poder para gobernar. El peronismo gobierna con el pueblo”.
Luego de transmitir el saludo de la Presidenta, Zannini se refirió no sólo al partido sino también a la situación nacional e internacional. “Este congreso prepara la estrategia para la batalla más importante de los últimos años”, aseguró. Según el funcionario, “el PJ con este acto contribuye a darle espaldas al próximo presidente para esa lucha que durará hasta que Argentina quede desendeudada”.
El orador de cierre fue el titular del partido, el jujeño Eduardo Fellner, que arremetió contra la alianza UCR-PRO, aprobada en una tensa convención en Gualeguaychú. “Al peronismo no lo unen el oportunismo ni el espanto, nos unen el ideal y el corazón. No necesitamos pasar la noche para tratar de justificar cómo pisoteamos nuestros ideales, nosotros preferimos quebrarnos y no doblarnos”, remató el gobernador, minutos antes de que comenzara a sonar la histórica marchita peronista y que los militantes de la JP entonaran su versión dedicada a “Néstor y Cristina”.
Sábado, 9 de mayo de 2015
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