POLÍTICA Cruce por la identidad peronista entre massistas y kirchneristas  De Vido y Mariotto acusaron de “liberal” al intendente. Massa llamó a romper “la lógica amigo-enemigo”. “¿Y vos creés que Sergio les va a contestar?”. Los asesores de Sergio Massa caminaban junto con el intendente por el centro de Morón, cruzaban de un comercio a otro y aprovechaban el contacto con chicos y grandes para sacar una y otra foto de campaña, cuando llegó la pregunta sobre el diagnóstico que hacían de su jefe el ministro Julio De Vido y el vicegobernador Gabriel Mariotto: que no forma parte del peronismo y que expresa una corriente neoliberal. Massa, un día después de la reunión del Consejo Nacional del PJ, prefirió el silencio. Sólo dijo: “Nuestra idea es interpretar al mejor peronismo”.
En seguida, otra frase que ha repetido mucho en la campaña: “Tenemos que romper el gran prejuicio de la política argentina: la lógica amigo-enemigo”. Ciertamente, la pelea por el control del partido que fundó Perón –a cargo interinamente de Daniel Scioli desde la muerte de Kirchner y en el que se postergaron dos veces las elecciones– y el incipiente debate que se abre entre los clásicos y el cristinismo de paladar negro no pasó por alto en el Frente Renovador, más allá de que Massa buscó hacerse el desentendido. En su fuerza deliberan qué conviene hacer: si dar o no pelea desde adentro después de domingo 27, cuando una segura victoria lo ponga en el centro de la escena.
Por lo pronto, un día después de que el Consejo Nacional se encolumnó detrás de Cristina, Mariotto y De Vido intentaron marginarlo por anticipado. “ Massa no forma parte del peronismo. Ha asumido otro espacio político, otro partido. La vertiente neoliberal que expresa su frente lo pone más cerca de otras instituciones partidarias”, dijo Mariotto. De Vido lo quiso pegar a las ideas de Menem. “Esos renovadores no quieren renovar nada, sino volver a los noventa. Massa tiene ideas pero no las puede debatir porque tiene que explicar qué es lo que haría con las tarifas de transporte o de energía”, apuntó.
El tigrense no quiso confrontar con ninguno de ellos, tampoco con Héctor Recalde –quien lo acusó de empezar a dejar en claro cuál es su ideología, similar a quienes “flexibilizaron” en la década menemista–, pero sí se subió al ring uno de sus aliados, el intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre.
“Es poco serio lo que dicen y no es gente seria la que lo dice. Hace dos meses los mismos protagonistas decían que el representante de las corporaciones, el neoliberal y candidato de Clarín era el que en la reunión del Consejo se sentó en la cabecera de la mesa del Consejo”, dijo, en alusión a Scioli.
La pelea con el gobernador se ha precipitado. “Massa es afiliado al peronismo, escucha y trabaja para y resolver los problemas de la gente. ¿Cómo no va a ser peronista? Además, me pregunto: ¿Cómo les fue en las elecciones al que estaba en la cabecera y a quienes hoy nos atacan?”, insistió De la Torre. En el entorno de Massa, siempre atentos a las encuestas, decían que De Vido y Mariotto son castigados por el 70% de la población y creían que sus críticas podrían ser un búmerang para Martín Insaurralde.
Fuente: Clarín.
Miércoles, 2 de octubre de 2013
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